Desde el 2003 el famoso Día de los Muertos, que se celebra el 2 de noviembre, fue incluido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
La importancia del turismo en el país se refleja en los 4 millones 308 mil empleos que registró al segundo trimestre de 2019, según la Secretaría de Turismo.
El país sigue posicionándose como uno de los más apetecidos a nivel mundial para recibir viajeros. Según cifras del gobierno anterior, la nación pasó de acoger 23 millones de visitantes en 2012 a 35 millones en 2016. De igual manera, se generan 4 millones 308 mil empleos por la industria, donde los europeos tienen una gran inclinación por visitarlo; Reino Unido con 590.945 turistas, es el principal emisor de viajeros procedentes del viejo continente.
Ostelea, entidad perteneciente al Grupo Planeta Formación y Universidades, realizó el informe ‘Turismo oscuro: perfiles, nichos, motivaciones y experiencias a nivel mundial’, donde México fue uno de los casos de análisis. Allí se revela que uno de los enfoques que llama la atención de los viajeros es el turismo oscuro y -a nivel global- Halloween es uno de los factores que más lo fomentan.
Para el caso de México el foco se centra en el Día de los Muertos, celebrado el 2 de noviembre y está incluido en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. Para la época uno los destinos que más afluencia recibe es la ciudad de Oaxaca, por sus tradiciones ligadas a la celebración, por ejemplo, las ofertas florales y los banquetes en sus cementerios.
Al respecto, Elsa Soro, docente de Ostelea, detalló: “El turismo oscuro no es una tendencia contemporánea. En la Edad Media existía una ‘tradición thanatoptic’, que se intensificó en el siglo XIX por la influencia de los movimientos artísticos del Romanticismo y del Neogótico que tenían en sus ideales estéticos un especial interés por la muerte y el dolor. En cuanto al impacto actual, encontramos que en 2017 una búsqueda en Google de la expresión ‘turismo oscuro’ obtuvo más de 50.800 resultados, en inglés ‘dark tourism’ presenta más de 2.800.000 registros, lo que revela un fuerte interés por parte de los internautas hacia el fenómeno”.
Es así como dentro de las principales atracciones para los turistas que están ligadas al turismo oscuro, se encuentran cementerios, memoriales, campos de concentración, prisiones, crematorios, sitios de ejecuciones públicas y desastres naturales, atracciones que responden a la necesidad del viajero contemporáneo de vivir experiencias únicas, impactantes y -tal vez- extremas.
En el estado de Hidalgo, en el parque ecológico Eco Alberto, se organizan caminatas nocturnas para turistas que simulan el cruce de la frontera con Estados Unidos por parte de los inmigrantes indocumentados. El precio promedio de la experiencia es de 250 pesos mexicanos e incluye dos días y una noche, donde se ofrecen elementos experienciales y emocionales como atravesar túneles y sufrir el secuestro por parte de traficantes ficticios de personas.
La iniciativa nace con el propósito de crear empleo para la comunidad indígenas hñähñu y evitar su éxodo hacia Estados Unidos, además de concientizar a los viajeros sobre el drama de ser migrante. Las empresas que organizan los tours afirman que la mayoría de los clientes proceden de Argentina, Chile, Perú, Colombia, Estados Unidos, Canadá y Francia y suelen ser jóvenes o parejas.
De igual forma, al estado de Chiapas llegan muchos visitantes internacionales interesados en los “zapatours”, viajes enfocados en conocer de primera mano el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, quienes toman la opción son en su mayoría son jóvenes europeos, quienes en algunos casos empiezan una actividad de cooperación internacional en la región y terminan queriendo obtener más información sobre esta ‘lucha’. Otro perfil suele ser el de los investigadores internacionales en Ciencias Sociales atraídos en realizar trabajos de campo sobre los movimientos sociales.
El turismo oscuro se relaciona a acontecimientos trágicos y al crimen (por lo general), pero Soro explicó que las prácticas y actividades que abarca son amplias. Para diversificar su público, las empresas y agencias especializadas deberán interceptar nichos de mercados afines -por ejemplo- el turismo de patrimonio, educativo, cinematográfico y de aventura. Asimismo, el aumento del interés por parte de los viajeros internacionales, se traduce en el incremento de la inversión por parte de las entidades públicas y privadas. Allí vale la pena analizar el caso de Malasia, cuyo gobierno ha invertido más de mil millones de euros en un Plan Nacional orientado a mantener y mejorar los sitios asociados a esta práctica.
Para Ostelea, además de requerir una convergencia entre diferentes frentes del turismo, también debe hacerse con responsabilidad y un propósito social. “Es evidente que el turismo oscuro puede presentar problemas éticos, vinculados a la mercantilización del sufrimiento, la muerte y la memoria histórica. Sin embargo, el papel de quienes investigan las prácticas turísticas en cuanto fenómenos sociales, culturales y económicos, no es condenar el turista o la industria por ser o no ser ética, sino más bien examinar cómo y porqué en determinados contextos geográficos y momentos históricos se otorga valor a sitios y fenómenos. Dicho valor no es brindado exclusivamente por iniciativa de los turistas, sino que todas las partes interesadas, las administraciones locales, la empresa privada y los medios de comunicación, pueden contribuir a construir un atractivo turístico más allá del propósito económico”, aseveró Soro.
Los perfiles del viajero
La figura del ‘turista oscuro’ se puede determinar a partir del cruce entre el turista cultural y de patrimonio, de experiencia y aventura. Ostelea citó un análisis de la segmentación del turismo internacional y que elaboró una serie de tipologías de viajeros en función de sus motivaciones y preferencias a partir de una encuesta.
El descubridor: viaja a destinos como Francia, Turquía y Brasil, además es un turista especialmente formado y de mediana edad.
El vital: prevalece en los mercados maduros lejanos, es joven y con un alto nivel de educación, en este perfil destaca la presencia de un alto porcentaje de estudiantes.
El cultural: tiene presencia en mercados europeos maduros, al que se le suma un nivel educativo medio y un gran porcentaje de pensionados.
Sobre Ostelea, School of Tourism & Hospitality (www.ostelea.com)
Es un centro Universitario Internacional especializado en la formación de líderes y directivos de la industria del Hospitality y del Turismo. Cuenta con el apoyo de tres partners académicos de lujo, EAE Business School, L'Universitat de Lleida y la Universidad Rey Juan Carlos. Ostelea es miembro afiliado de OMT (La Organización Mundial del Turismo).
En la actualidad, el Máster en Gestión Internacional del Turismo ha sido reconocido por tercer año consecutivo como uno de los mejores 20 máster del mundo en la categoría de Turismo & Hospitality, según el Ranking “Eduniversal Best Masters Ranking Worldwide 2019" y según el Ranking El Mundo 2018, mejor máster de Barcelona y cuarto en España en su categoría.
El Máster en Organización de Eventos, Protocolo y Turismo de Negocio (MICE) de Barcelona, ha quedado clasificado como el primer máster de Barcelona y de España según el Ranking El Mundo 2019 en la categoría de Turismo Especializado y en el Top 10 a nivel internacional según Eduniversal 2019. El Máster en Dirección Hotelera y Restauración Full Time impartido en el campus de Barcelona ocupa puesto número 13 en el Ranking Eduniversal y el Master in Sustainable Tourism Destinations and Regional Tourism Planning destaca porque es la primera vez que se presenta y entra con éxito en el ranking mundial ocupando el puesto número 41 en la categoría Sustainable Development and Environmental Management. Y único en España.