La perla tapatía es uno de los estados con mayor oferta artesanal en México.
Guadalajara, Tlaquepaque, Tonalá y Zapopan producen un sinfín de artesanías de todo tipo.
Ciudad de México.- La temporada navideña es una de las épocas más esperadas de todo el año, es el momento perfecto para compartir, celebrar y recordar a lado de familiares y amigos, disfrutar de una tradicional posada acompañada de ponche, antojitos, aguinaldos, dulces de colación, etc. Pero también es una excelente ocasión para obsequiar un regalo que quede en la memoria, y que mejor opción que algo hecho por manos mexicanas. Es por ello que, Guadalajara, poseedora de una riqueza artesanal importante, te invita a que estas fiestas decembrinas, regales una artesanía tapatía.
Guadalajara se ha convertido en uno de los sitios preferidos para compradores en fin de año, a través de la gran variedad de productos de alfarería, piel, cristalería, joyería o ropa regional, es como miles de visitantes y locales se surten en estas fiestas. Sin lugar a dudas encuentras estas artesanías en prácticamente todo el Centro Histórico de la Zona Metropolitana de Guadalajara, sin embargo existen lugares icónicos y tradicionales como el Mercado Libertad, popularmente conocido como Mercado de San Juan de Dios, el Centro Joyero, el Paseo Hospicio o sus calles aledañas.
Tlaquepaque es considerado uno de los centros más importantes de producción alfarera de la República Mexicana, y es paraje perfecto para adquirir una pieza artesanal única, ya que producen alrededor de 9 clases de lozas que son elaboradas con diversas técnicas en las que destacan el barro bruñido, barro canelo, caolín o de alta temperatura de la que se desprenden figuras a escala, nacimientos, ollas, jarros, floreros y vajillas, si la opción es ropa, las blusas vestidos y faldas bordados a mano con mantas crudas, popelinas, mantas y gazas son la mejor elección.
El arte de la talabartería juega un papel importante en esta ciudad, ya que no sólo es transformada en ropa, bolsas o calzado también se fabrican los típicos equipales, estos muebles de origen prehispánico hechos a base de piel y madera, otra de las compras que se pueden hacer son las de coloridas figuras hechas con papel mache, las cuales han alcanzado niveles técnicos y artísticos que tienen como resultado esculturas únicas de todo tipo, siendo estas las ideales para colocarse en cualquier espacio.
Tonalá ha sido de otro de los lugares más importantes para fabricación de artesanías desde la época prehispánica, en la actualidad se encuentran una cantidad considerable de talleres artesanales de los cuales salen piezas de vidrio soplado, hierro forjado, papel mache o muebles rústicos, así como una amplia variedad de técnicas en barro. Pero si algo distingue a esta ciudad es la técnica del barro betus, que resalta por su decorado de anilina, acrílico y una amplia gama de colores que antes de entrar al horno son bañadas con aceite betus un aceite de resina que es disuelto con aguarrás o laca sintética y que representan a gallos con rostros de humanos, nahuales, lechuzas y reproducciones arquitectónicas, lo que las convierte en un peculiar obsequio.
Y por último, una de las opciones más representativas de la perla tapatía, el tequila, se puede encontrar en sus diferentes presentaciones blanco, reposado o añejo, pero ningún lugar mejor para conseguirlo y degustarlo como el Pueblo Mágico de Tequila. En este lugar se pueden adquirir tarros y barriles de madera hechos de roble, así como ánforas forradas de piel, artículos fabricados con la piña y hojas de agave como bolsas, monederos, pulseras, etc.
Sin lugar a dudas, Guadalajara y su extensa oferta de artesanías es una gran opción no sólo para las compras de fin de año, sino en cualquier temporada, ya que se trata de un producto 100% hecho por manos mexicanas y de tradición tapatía.
